domingo, 14 de septiembre de 2014

EL ESPEJO


No necesitas verte al espejo para saber como estas, como eres o como te ves…

Mira a tu alrededor, observa tu cotidianidad, tu pareja, tus amigos, tu gente cercana, tus compañeros de trabajo, tu familia…

Escucha lo que dices sobre tu situación, tu país, tu acontecer, la descripción que haces constantemente de los demás…

Date cuenta de lo que sientes, descubre tus emociones en relación a tu entorno, a tu gente a tus espacios, piensa en lo que piensas, en que lo haces, cuáles son tus pensamientos recurrentes…

Analiza lo que te sucede, tus vivencias cotidianas, las buenas y las que no lo son tanto…

Lo que ves, piensas, sientes y hablas acerca del mundo, de tu país, de tu ciudad, de tu casa, de tu trabajo, de tu gente, de tus amores, de tu cotidianidad en general, es tu ESPEJO.

ESO ERES TÚ.


HABLANDO ABLANDO

sábado, 13 de septiembre de 2014

EL PERDÓN


¿Nos incomoda el perdón? ¿Perdonamos realmente? ¿Sabemos perdonar? ¿Entendemos el perdón?

Usualmente perdonamos al otro desde la separación y la dualidad, “El me agredió” “El otro me abuso” “Ella me engaño” “Ellos me atacaron” y al señalar al culpable lo hacemos desde el EGO, culpabilizando al otro y posicionándonos en superioridad ante él porque YO soy capaz de perdonarlo, culpabilizo al otro desde el YO también agresor sin darme cuenta, él o ella fue y YO soy el o la pobre víctima. No hay real perdón, no hay liberación, continuo con la agresión y es solo un hecho de palabra, nada más…

Si al sentirme agredido, abusado, engañado o atacado por otros entiendo que soy responsable también de ese hecho porque TODOS SOMOS UNO entiendo desde la unicidad que es a mí a quien en primera instancia debo perdonar y surgen las reales interrogantes ¿Por qué A TRAVÉS DEL OTRO me agredo? ¿Por qué me abuso a mi mismo? ¿Por qué me engaño? ¿Por qué me ataco? Entonces, surge el real perdón, sintiéndolo desde mi interior porque es a mí a quien debo perdonar primero e instantáneamente surge el perdón al otro, que solo me sirvió de espejo.

Es muy duro aceptar la responsabilidad individual en lo que nos pasa y en lo que vivimos cotidianamente, incluso ante los eventos más atroces y fuertes que decidimos vivir, pero es el primer paso a entender nuestro proceso de aprendizaje de vida, el perdón sana, libera y une, desde nuestro interior, mi perdón al otro comienza en mi, perdonándome a mí mismo primero, me perdono, me libero y me sano…
El perdón es AMOR.